Nueva unidad para desaparecidos

MEXICO - El gobierno de México instalará una unidad especial para buscar a personas desaparecidas, en medio de un reconocimiento de que las autoridades no han logrado realizar investigaciones adecuadas para dar con su paradero y de manifestaciones de desconfianza de algunos familiares.

La unidad dependerá de la Procuraduría General de la República que concentrará a investigadores y policías que sólo se dedicarán a la búsqueda de desaparecidos, que una base de datos oficial estima hasta ahora en más de 26,000.

El secretario de Gobernación, Miguel Angel Osorio Chong, y el procurador general, Jesús Murillo, anunciaron el lanzamiento de la unidad y prometieron que trabajarán de la mano de los familiares, algunos de los cuales estuvieron presentes y manifestaron sus dudas ante las autoridades porque hasta ahora no los han ayudado.

"¡En este país no hay justicia!", "¡Nosotros trabajamos mejor que ellos!", gritaron algunas madres al final de la presentación de la unidad.

"Sabemos lo insatisfechos que están", dijo antes Osorio y aseguró que "no será un tema de olvido". El procurador Murillo dijo que la idea de la unidad es evitar el "laberinto" burocrático que obliga a los familiares de desaparecidos a acudir a varios lugares e incluso a realizar investigaciones por su cuenta.

"No hacemos magia, vamos a llegar hasta donde se pueda llegar... vamos a agotar todas las opciones y hablar con absoluta verdad sobre las posibilidades de los resultados", señaló Murillo.

El grupo contará en principio con 12 agentes del ministerio público para realizar investigaciones con apoyo de un grupo de la Policía Federal, cuyo número no fue precisado. Las autoridades dijeron que también se prevé que esa unidad concentre una sola base de datos sobre desapariciones, que actualmente está en varias oficinas gubernamentales.

Osorio dijo la semana pasada que las autoridades federales trabajan en la depuración de la base de datos que registra a 26,121 desaparecidos y aseguró que el número será mucho menor porque hay casos de personas que volvieron a sus casas o emigraron que no fueron notificados al gobierno.

Raúl Plascencia, presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, dijo que el organismo tiene un registro propio de 24,800 personas extraviadas o no localizadas, además de 2,432 casos que se presumen fueron desapariciones forzadas, es decir, en los que de alguna manera participaron las autoridades.

Las desapariciones se han convertido en un tema sensible en México, donde innumerables familias han denunciado que algún familiar fue plagiado por grupos del narcotráfico o incluso autoridades sin que hasta ahora se conozca su paradero.

Varias zonas de México se han visto marcadas en los últimos años por la violencia del narcotráfico, que también se tradujo en unas 70,000 muertes entre 2006 y 2012, según datos oficiales. Beatriz Mejía, de 49 años, fue una de las madres que se levantó a reclamar la falta de trabajo de las autoridades.

"Todo esto que hicieron ahorita (el anuncio de la unidad) fue una pantalla nada más para ellos, no para nosotros", dijo a The Associated Press Mejía, quien sufrió la desaparición de su hija en 2011 y tras meses de investigaciones propias dio con su paradero: una fosa común en el Estado de México, vecino a la capital del país.

"(Esto) nada más es para ellos, para quedar bien ellos... el dolor de nosotros a nadie le importa", añadió la mujer, quien dice que espera justicia y que se detenga a las personas que secuestraron y mataron a su hija de 21 años.

Refirió que su hija Alejandra Viridiana desapareció el 4 de noviembre de 2011 en el Estado de México y que en medio de la falta de apoyo de las autoridades comenzó una investigación propia hasta que supo que dos hombres la habían secuestrado de un bar e incluso logró ubicar a uno de ellos en el oeste del país.

Dijo que desde el primer momento acudió a autoridades, primero estatales y luego federales, sin obtener apoyo. De hecho, contó que la primera respuesta que recibió fue que su hija "se había ido con el novio, que al rato regresaba".

"Empecé a investigar, día, tarde y noche... llevándoles información", dijo. Sin embargo, añadió, "no hicieron nada".

Ahora Mejía está en trámites para que las autoridades le entreguen el cuerpo de su hija. Para el presidente de la Comisión Nacional de Derechos Humanos la reacción de las madres es "muy explicable, en el sentido de que lo que exigen es justicia, lo que exigen son los resultados y esperamos que esos estén pronto".

Aseguró que el organismo estará pendiente para señalar cualquier posible omisión de las autoridades respecto del trabajo de esta nueva unidad, la cual se creó después de que familiares de desaparecidos, sobre todo madres, hicieran una huelga de hambre por más de una semana frente a las instalaciones de la Procuraduría General.

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