Muchos conductores llegaron a sus trabajos esta mañana estrenando el nuevo tramo de la autopista President George Bush Turnpike. La porción de 6.5 millas conecta dos de las más concurridas autopistas de este a oeste de Texas: la Interestatales 20 y la Interestatal 30. Es el proyecto más grande que ha hecho la North Texas Tollway Authority y representa un bienvenido alivio para los conductores.
Los conductores que estrenaron el lunes el nuevo tramo de la autopista, lo hicieron sin problemas que reportar. El proyecto le ha tomado a los ingenieros encargados 2.5 años para llegar a este punto. Actualmente se está terminando la fase final del proyecto de la autopista 183 a través de Grand Prairie a la Interestatal 20. Ahora es parte del circuito de 52 millas alrededor de Dallas. Para los, alrededor de, 100,000 conductores que utilizarán el nuevo tramo todos los días, les va a costar alrededor de 90 centavos, con Tolltag y un 50 centavos adicionales para los clientes de Ziptag. Con esos peajes se está pagando la factura del proyecto de $425 millones. Todavía hay dos rampas en las que se está trabajando. Se espera que la obra sea completamente terminada a principios del 2013.
