LOUISVILLE, Kentucky - Una pequeña niña encontrada en el campo después del paso de varios tornados violentos falleció el domingo después de que se le retiró un respirador artificial, terminando una historia esperanzadora para los sobrevivientes de la devastación ocasionada por las tormentas en el centro y sur de Estados Unidos. La muerte de la niña de apenas año y medio aumentó a 39 la cifra total de víctimas fatales de los tornados del viernes en cinco estados.
Rescatistas continuaban yendo puerta por puerta en áreas rurales para descartar más víctimas.
Otra serie de tormentas ocurridas a inicios de la semana pasada mató a 13 personas, el más reciente en una cadena de episodios de clima severo que han desolado el corazón del país en el último año. Angel Babcock, de 15 meses y residente de New Pekin, Indiana, fue encontrada después de que la casa móvil de su familia fue destruida por las tormentas del viernes. Su padre, su madre y dos hermanos murieron.
Cuando Angel llegó el viernes por la noche al Hospital Infantil Kosair en Louisville, ella abría sus ojos, una señal esperanzadora, dijo el jefe de enfermería Cis Gruebbel. Las cosas cambiaron el sábado, pues no disminuía la inflamación en su cerebro, afirmó.
Con el transcurso del día, sus ojos dejaron de moverse y su salud continuó deteriorándose: ya no había señal de actividad cerebral. Personal médico dijo a la familia que no había nada más que pudieran hacer. Con familiares reunidos para decir adiós a la pequeña, éstos decidieron retirarle el domingo el respirador artificial. "Angel se ha reunido con sus padres", dijo en un comunicado su abuelo, Jack Brough.
