La perrita llamada “Maggie” fue robada de la casa de sus dueños el pasado mes de mayo y después de más de cuatro meses de ausencia, ésta volvió al lado de sus amos.
“Nuestra única esperanza era que quien fuera que se la había llevado que la cuidara, porque no quería que la lastimaran” dijo Scott Hancock, el dueño de Maggie.
Pero el jueves, la policía de Arlington hizo una parada de tránsito y en el carro encontraron el iPad de Scott, el cual había sido robado de la casa.
Las autoridades consiguieron una orden de cateo para revisar el departamento del conductor y fue ahí donde encontraron al bulldog.
La familia no puede creer que la perrita fuera encontrada sana y salva y no solamente eso, en cuatro meses y medio, pasó de pesar 15 libras a pesar 50.
La familia había pensado que nunca iban a recuperar a Maggie así que adoptaron a otro bulldog llamado Lilly. Lilly y Maggie apenas están empezando a ser amigos.
