En video: de la mano, se lleva a niña antes de violarla

Las autoridades creen que el culpable sería un joven menor de edad, pero aún no hay arrestos.

La policía de Nueva York tiene nueva información que podría conducir al arresto de un joven acusado de violar a una niña de 12 años en el 2015.

Los detectives tienen información de ADN e imágenes tomadas de vigilancia de un individuo que sospechan del suceso, ocurrido el 24 de febrero del 2015 en el Bronx, pero hasta ahora no ha habido arrestos.

La detective Diane Crowley está haciendo un llamado al público a que suministre cualquier información que tenga sobre el caso. 

“Ella era apenas una pequeña, esto es lo peor de lo peor”, dijo Crowley.

Las imágenes de la cámara de vigilancia muestran a un joven con pantalones beige y una chaqueta azul, con gorro y capucha. La cara es borrosa, pero no es imposible de reconocerla, dijeron las autoridades.

Parte del problema, dice Crowley, es que el perpetrador probablemente era joven también, quizá de 14 ó 16 años, y nadie quiere estar equivocado y entregar a un muchacho inocente.

“Obviamente con la cantidad de evidencia que tenemos no existe la posibilidad de que mandemos a la cárcel a la persona equivocada”, dijo la detective.

“Seguro alguien vio algo, o escuchó algo, o le dijeron”, añadió.

La policía está ofreciendo una recompensa de más de $22,000 por cualquier pista que lleve a un arresto.

Crowley dijo que todavía está traumatizada por el caso. Recuerda haber llegado al hospital y ver a la niña acostada en la cama, su uniforme sucio y desmadejado, sus anteojos rotos.

El suceso ocurrió en el Bronx, en la zona de East Tremont, cuando la pequeña se estaba bajando del autobús BX19 para tomar otro autobús que la llevara a casa.

Después del ataque, la chica llamó a su madre, quien la recogió y la llevó al hospital.

Pero la niña tuvo dificultad en expresar lo que le había pasado.

“Ella tuvo que describir cosas que le pasaron para lo cual ella no tenía el vocabulario”, dijo Crowley. “Ella nunca había visto el cuerpo de un hombre”.

Crowley inmediatamente puso manos a la obra. Los detectives interrogaron a pandilleros locales, escudriñaron las imágenes de las cámaras de vigilancia. Pero la niña no reconocía al individuo.

Crowley dice que la menor está pasando momentos difíciles. Sufre de ansiedad y no puede dormir. Pero poco a poco se está convirtiendo en una mujer capaz e inteligente y está haciendo lo mejor que puede.

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