Hunter Biden se declaró no culpable este martes de cargos federales de posesión de armas de fuego que fueron presentados después de que se vino abajo un acuerdo de culpabilidad tras una larga investigación federal.
Biden está acusado de mentir sobre su consumo de drogas al momento en que compró un arma de fuego en octubre de 2018, durante un periodo en el que ha reconocido haber luchado contra la adicción al crack. El hijo del presidente está acusado de conservar el arma durante 11 días.
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Los tres cargos federales que enfrenta son:
- Declaración falsa en la compra de un arma de fuego.
- Declaración falsa relacionada con la información que debe conservar el distribuidor federal de armas de fuego con licencia.
- Posesión de un arma de fuego por parte de una persona que es un usuario ilegal o adicto a una sustancia controlada.
Dos de los cargos conllevan penas máximas de prisión de 10 años, mientras que el tercero tiene un máximo de 5 años. Es probable que cualquier sentencia se cumpla al mismo tiempo. Cada cargo también conlleva multas de hasta $250,000.
Biden salió en libertad con las siguientes condiciones: supervisión de un oficial de libertad condicional, búsqueda activa de empleo, no posesión de armas, no consumo de alcohol, no consumo de drogas y deberá someterse a pruebas de detección de drogas si lo requiere la oficina de libertad condicional.
El acta de acusación de tres cargos por parte de un fiscal especial que supervisa el caso se produjo semanas después de que colapsara el acuerdo de culpabilidad y vuelve a poner el caso en camino hacia un posible juicio de enorme relevancia de cara a las elecciones de 2024.
El hijo del presidente Joe Biden pidió declarar su no culpabilidad en una comparecencia a distancia por videoconferencia, asegurando que así evitaría los costos de protección del Servicio Secreto en sus desplazamientos desde su domicilio en California hasta Delaware, así como los problemas logísticos en Wilmington.
Se tiene previsto que los fiscales se opongan a esta solicitud.
Hunter Biden también ha estado bajo investigación por sus negocios, y el fiscal especial ha indicado que podrían presentar cargos fiscales en su contra en algún momento en Washington o en California, donde reside.
