El juez del condado de Dallas, Clay Jenkins y el Dr. Philip Huang, director de Salud y Servicios Humanos, piden no quitarse la mascarilla durante las celebraciones de esta época decembrina.
En conferencia de prensa pidió trabajar juntos para disminuir los contagios porque la situación no es favorable en este momento y por ello exhorta a no celebrar en grupos grandes, que las familias se unan pero virtualmente para navidad y fin de año.
"Ahora es el momento de hacer pequeños sacrificios para mantener a nuestra comunidad y nuestro país fuertes en este momento de alta difusión sin precedentes. Se acercan las vacunas a toda la comunidad. Manténgase en la lucha", tuiteó Jenkins el jueves por la noche.
La conferencia de prensa es segumiento del informe del jueves del Departamento de Salud del condado, donde se informa que hay más de 800 pacientes con COVID-19 en los hospitales del condado y advirtió pronto el sistema hospitalario podría no tener cabida.
Por su parte, el Dr. Philip Huang, director de Salud y Servicios Humanos del condado Dallas, informó que en las últimas 24 horas se registraro 2,258 nuevos casos de COVID-19 y otras 10 muertes.
Y solo quedan 32 camas disponibles en las unidades de cuidados intensivos.
Ha sido una semana histórica de progreso en la batalla de Texas contra el coronavirus. Las primeras vacunas COVID-19 comenzaron el lunes con un despliegue limitado en hospitales seleccionados en todo el estado.
Para el martes, los envíos de vacunas se expandieron a docenas más de hospitales, con la prioridad de vacunas dada a los trabajadores de atención médica de primera línea.
El jueves, el gobernador Greg Abbott dijo que el estado estaba en camino de proporcionar más de 1 millón de vacunas a los texanos para fin de mes, la campaña de vacunación más grande en la historia de Estados Unidos.
Se espera que la cantidad de vacunas recibidas aumente la próxima semana cuando Abbott dijo que el estado podría recibir vacunas tanto de Pfizer como de Moderna.
Abbott dijo el jueves que debemos usar todas las herramientas que tenemos para reducir las hospitalizaciones en el estado, incluido el uso de máscaras, la práctica de la distancia social y el lavado frecuente de manos, pero también alentó el uso de medicamentos de terapia de anticuerpos diseñados para combatir el virus.
