14 mujeres del norte de Texas acusan a un hombre que las agredió sexualmente cuando les tatuaba alguna parte de sus cuerpos por un precio asequible.
El hombre identificado como Chapman Edward Swindell, alias ''Eddie BigBee'' presuntamente le dijo a una mujer que hizo una declaración jurada a la policía de Lewisville, que empezó a realizarse un tatuaje porque el precio era barato y que la segunda sesión sería en el apartamento del sospechoso.
Pero el proceso era tan doloroso que Eddie BigBee le ofreció un whisky y ella lo rechazó. Entonces, mientras descansaban, el le sugirió pintarle algunos dibujos en las piernas y ella aceptó.
En ese momento, el hombre de unos 6 pies de estatura y unas 200 libras de peso, se le fue encima y la penetró con sus dedos. Después de forcejear con ellas, logró someterla y violarla, según consta en el documento oficial.
Investigadores de la policía de Lewisville, han logrado localizar a más de 10 mujeres que alegan que también fueron víctimas pero que nunca lo han denunciado porque Chapman Edward Swindell las amenazaba de que ellas consumieron drogas.
Y es que según indagaciones previas, las mujeres aceptaban metanfetaminas para aliviar el dolor que produce tatuarse.
