Tras una hora y media de debate, el Concejo de Dallas tomó la decisión sobre el toque de queda para jóvenes en la ciudad en la que incluye cambios en las sanciones para aquellos que violen la ordenanza.
Los concejales tenían dos opciones para votar. Primero, la propuesta del Concejal Omar Narváez que planteaba tratar la violación del toque de queda como una ofensa civil y no criminal.
Segundo, la propuesta del Concejal Adam McGough, que finalmente fue la que ganó.
Tras la aprobación, la multa fue reducida del máximo de $500 a $50 y los jóvenes tendrán dos oportunidades antes de que se les dé la multa. Y si no tienen dinero para pagar la multa, podrán pagar su deuda con trabajo comunitario.
Si un joven es sorprendido por tercera vez fuera de horario y no paga la multa, el protocolo seguirá siendo que un juez pueda ordenar su detención. Esto es precisamente a lo que se oponen algunos, pues convertiría en delincuentes a jóvenes que solo estaban en la calle.
Básicamente, el toque de queda prohibe a los menores de 17 años estar en la calle desde las 11:00 p.m. hasta las 6:00 a.m. de los domingos, lunes, martes, miércoles y jueves, y de las 12:01 a.m. hasta las 6 a.m. del sábado y domingo.
Aunque hubo inconformidades por la aprobación entre algunos miembros de la comunidad, el presidente del Sindicato de Policías de Dallas se mostró contento con la decisión.
Señaló que se hace para salvar vidas de jóvenes, y que aquellos que se oponen deberían preguntarse qué hace un niño de 13 años en la calle a las 3 de la mañana.
Local
Algunos miembros de la comunidad han señalado que este toque de queda solo se enfoca en jóvenes de grupos de minorías, en especial latinos y afroamericanos.
