Tras el anuncio del gobernador de Texas a inicios de esta semana, miles de restaurantes pueden abrir sus puertas a partir de hoy 1 de mayo, pero con ciertas restricciones.
Algunos tienen dudas sobre la situación que se vive por el coronavirus en el norte de Texas y decidieron no abrir, por lo que prefieren seguir con el servicio de comida para llevar.
Y es que esta reapertura parcial de negocios, cines, centros comerciales y restaurantes, no ha convencido a todos mientras la reapertura plantea ciertas restricciones como que solo pueden estar al 25% de su capacidad.
De hecho, algunos argumentan que no les conviene económicamente, además de que el riesgo de contagio está latente.
Ayer, autoridades reportaron que el jueves 30 de abril fue el peor día en Texas respecto a muertes por COVID-19. Se registraron 50 casos, a un día de que se reabriera parcialmente Texas.
En la zona metropolitana de Dallas-Fort Worth, integrada por los condados Tarrant, Denton, Collin y Dallas, se registran más de 7,200 casos de COVID-19 y 214 muertes.
“Ahorita nos vamos a esperar una semana o dos semanas para analizar la situación de cómo funciona, y ya cuando estemos seguros de que ya es seguro abrir para nuestros clientes, que no corran ningún riesgo de contagio, abriremos”, dijo Micaela González, gerente de una restaurant.
Autoridades han exhortando a los restauranteros que hoy abrieron, a que mantenga la distancia social, el uso de mascarillas y la higiene extrema.
