TEXAS - Con 3 votos a favor y 2 en contra, comisionados del condado Tarrant aprobaron la extensión del polémico programa 287(g) que permite que agentes del orden realicen tareas de inmigración.
Representantes de la comunidad inmigrante del Metroplex se mostraron disgustados ante la decisión, e incluso llegaron con pancartas al salón donde se tomó dicha decisión.
El contrato con las autoridades federales vence a finales de junio de 2020, pero hoy se analizó la renovación del mismo para el condado Tarrant.
Los líderes comunitarios esperaron su turno para hablar con los comisionados y así exponerles sus argumentos sobre el por qué estaban en contra del programa.
El programa federal 287(g) permite y faculta a que los policías de condado y/o ciudades puedan actuar como agentes de inmigración. Entre los trabajos se incluye el revisar documentos y detener a las personas hasta que sean arrestadas por agentes de la Oficina de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés).
“La policía que haga el trabajo de ayudar y proteger, [entonces] que deje a inmigración hacer su trabajo de inmigración”, dijo Ana Coca, representante de LULAC, quien esperó su turno para presentar los argumentos en contra del polémico programa.
Durante la votación, que se dio tras una discusión de 7 horas, también existió molestia entre los presentes porque la corte de comisionados recientemente cambió las reglas para este debate. En lugar de tener dos reuniones en donde la gente pudiera hablar, solo se tuvo una, que es la que se realizó hoy.
También, cambiaron el procedimiento para hablar ante ellos (comisionados) y no se pudo hacer de manera virtual como en el pasado. Todos debían estar presentes en el salón.