TEXAS – Personal médico desconectó de las
maquinas que mantenían con vida a un hombre guatemalteco que fue baleado en
Richardson, y ahora su hermana solo espera que él pueda ser repatriado.
Documentos de la corte indican que el día que ocurrieron los hechos, Elias
Lopreto quedó de verse en Richardson con Cameron Andrew Mills, quien ahora es
el sospechoso de los hechos.
Durante el encuentro, según los documentos, tuvieron un altercado donde Mills le disparó al hombre guatemalteco en la cabeza.
Los amigos de Elias dicen que como el fue diagnosticado con muerte cerebral, entonces no pudo explicarles quién es ese sujeto o lo que exactamente ocurrió.
“Ayer yo estaba tratando de estar con él en
el último momento de que nos dejaron…despidiéndome de él, diciéndole que lo voy
a extranar mucho”, dijo Hugo Hernández, amigo de Elias.
Por su parte, Julia López, hermana de la víctima dice que envió un video
autorizando a los médicos para que le sacaran los organos a su hermano, y así
estos fueran donados.
“Quiero que ese país demuestre, pues, su justicia porque mi hermano
llevó una muerte. Una muerte terrible que no se lo merecía”, agregó Julia. Documentos de la corte citan que el sospechoso se
fugó pero que después la policía lo encontró con ayuda de personas cercanas a
él.
Mills enfrenta cargos por asalto
agravado con un arma mortal, pero según autoridades, ahora que la víctima
falleció, los cargos podrían cambiar.