Autoridades en Texas informaron que la cifra de muertes de menores de edad por negligencia o abuso en 2017, disminuyó un 23 por ciento en relación con el 2016.
Poco más de 170 niños murieron en este estado, una cifra a las de los últimos ocho años en los que han fallecido entre 151 y 227 menores de edad, según publicó el sitio Austin American-Statesman.
De acuerdo con el Departamento de Familia y Servicios de Protección de Texas (CPS por sus siglas en inglés) las muertes de niños maltratados ha ido a la baja tras la decisión de realizar reformas importantes en los procedimientos y atención de casis en esa depencia estatal.
El alto índice de muertes de menores, la rotación de trabajadores y problemas relacionados con casos de menores maltratados de manera precisa y oportuna eran un complicación que debían de arreglar de manera inmediata.
Pero el grupo de defensa de los niños TexProtects reconoce que las reformas probablemente contribuyeron a la disminución de muertes, pero se necesita hacer más para prevenirlas, porque 170 decesos siguen siendo demasiados.
Y es que desde octubre del 2016, el Gobernador de Texas, Greg Abbott criticó severamente al CPS por tener 1,000 casos de menores en alto riesgo de abusos físico o sexual, que no se resolvían.
A inicios de ese mismo año, 113 mil casos estaban reportados, pero el CPS no los investigaba. Además, 2,100 investigadores renunciaron o fueron rotados de sus posiciones.
Por ello, el gobernador texano nombró a un veterano oficial de los Texas Rangers para que realizara cambios inmediatos y consiguiera más dinero del Congreso ya que esta dependencia enfrentaba un déficit de 40 millones de dólares.