Tras la investigación sobre 3 adolescentes que murieron por consumo de fentanilo en Carollton y que envió al hospital a otros 6, autoridades anunciaron hoy que han realizado más arrestos.
La fiscal federal Leigha Simonton anunció el arresto de otra persona relacionada con las sobredosis de fentanilo entre estudiantes del distrito escolar de Carrollton-Farmers Branch, identificado como Jason Xavier Villanueva, de 22 años y enfrenta cargos por conspirar para vender y distribuir drogas.
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Dijo que Villanueva usaba redes sociales para contactar y comunicarse con adolescentes.
También hicieron un enérgico llamado a los padres de familia para que sigan al pendiente de sus hijos, con sus actividades dentro y fuera de casa, y la revisión de sus redes sociales.
Una vez más, insistieron en que esto es una situación de vida o muerte, y el fentanilo hace la diferencia.
El agente especial de la DEA, Eduardo Chávez, dijo que la investigación sobre este incidente y otros más continúa.
Por su parte, el jefe de la policía de Carrollton, Roberto Arredondo, explicó que siguen trabajando con el distrito escolar para redoblar esfuerzos para la detección de todo tipo de drogas y/o actividades ilícitas que pongan en riesgo a la comunidad.
Dos presuntos traficantes de fentanilo fueron vinculados los casos de 10 sobredosis de menores, tres de ellos fatales, y han sido acusados federalmente, anunció la fiscal federal para el Distrito Norte de Texas, Leigha Simonton.
Luis Eduardo Navarrete, de 21 años, y Magaly Mejía Cano, de 29, fueron imputados mediante denuncia penal por su presunta participación para distribuir fentanilo. Ambos fueron arrestados en la residencia de Navarrete en Carrollton.
Según la denuncia, Navarrete y Cano presuntamente vendieron píldoras falsas de Percocet y Oxycontin mezcladas con fentanilo, comúnmente conocidas como “M30”, a varios traficantes de drogas juveniles, en su mayoría estudiantes de la escuela preparatoria R. L. Turner, quienes a su vez vendieron las drogas a sus compañeros y a los estudiantes más jóvenes en las escuelas secundarias Dewitt Perry y Dan F. Long.
Nueve estudiantes de esas escuelas, con edades comprendidas entre los 13 y los 17 años, sufrieron diez sobredosis, tres de las cuales fueron fatales, entre septiembre de 2022 y febrero de 2023.
