Del tamaño de pelotas y de golf y hasta de tenis, una granizada en la madrugada de hoy, dejó daños en ventanas de casas y auto en varias zonas del Metroplex.
Pero las más afectadas fueron las ciudades de Coppell, Carrollton y Arlington, en donde los residentes se despertaron alarmados por los golpes de las bolas de hielo cayendo.
“Estaba durmiendo nada más que los golpes de granizo me despertaron que estaba muy fuerte y muy grandes” relató Luis Reyes de Carrollton en entrevista con Telemundo 39.
Otros residentes entrevistados, se asombraron de que cayera hielo del cielo ya que en los últimos días se han registrado altas temperaturas en el norte de Texas. De hecho, al amanecer de este miércoles, las nubes de tormentan se habían disipado y el sol salió como si nada hubier pasado.
