Con impotencia, indignación y enojo viven la madre y hermanos del joven de raza negra abatido por una policía de Dallas cuando ella se metió a la vivienda y disparó contra él creyendo que era un intruso en su departamento.
Procedentes de la isla caribeña de Santa Lucía, la familia de Botham Shem Jean de 26 años, quien murió por una balazo en el pecho, sólo piden una cosa: quieren saber qué pasó realmente.
Visiblemente emocionado, el primer ministro de Santa Lucía, dijo en conferencia de prensa, que no se explica cómo es que ocurrió esta situación y pidió justicia para la muerte de joven, contador de profesión y asiduo feligrés de su iglesia.
Por su parte, la fiscal de distrito del condado Dallas, Faith Johnson, dijo que un gran jurado decidirá si Amber Guyger de 30 años enfrentará cargos de homicidio.
Al momento los Texas Rangers quienes realizan la investigación, le impusieron el cargo de homicidio involuntario. Guyger también recibió una fianza de $300,00 la cual pagó y salió libre.
El incidente ocurrió la noche del pasado jueves en el complejo de viviendas South Side Flats, aproximadamente a una cuadra de la sede del Departamento de Policía de Dallas.
Según un oficial que pidió el anonimato, contó a NBC 5 que Guyger acababa de terminar un turno de 14 horas en un área de alta criminalidad en Dallas. Llegó al ascensor, se trasladó hasta un piso que no era el suyo y se dirigió a una vivienda que creyó era la suya, narró el oficial.
Dijo que al llegar a la puerta, tuvo problemas con la cerradura, que no podía abrir. Dejó unas cosas en el piso para seguir tratando, cuando el residente de la vivienda abrió y ella creyó que era un intruso. Sacó su arma y disparó. Nunca huyó y cooperó con las autoridades.
Pero el periódico The Dallas Morning News cita otra versión diferente. Otro policía de forma anónima contó que Guyger entró a la vivienda equivocada porque la puerta estaba abierta.
Falta por conocerse el resultado del exámen de drogas/alcohol que le hicieron a Amber Guyger, o si fue la fatiga un factor determinante para el mortal ''error'' de la agente del orden.
