A través de un comunicado, el Obispo de la Diócesis Católica de Fort Worth, Michae F. Olson, dijo que la política de ''cero tolerancia'' es un pecado y por ello se han estado recibiendo menores en esta ciudad.
La organización Caridades Católicas confirmó que varios de los menores separados de sus familias en la frontera han llegado hasta sus instalaciones, pero no explicaron cuántos tienen bajo su resguardo.
Lo que se sabe, es que este centro funciona como un programa de adopción temporal para el gobierno federal y reciben a todos los menores que las autoridades les envian.
Patts Svacina, vocero de esta organización, mencionó que seguirán recibiendo más niños y adolescentes en sus instalaciones que cuentan con todo lo necesario para albergarlos.
En Dallas, el Juez del Condado, Clay Jenkins, dijo que ya se trabaja para que sea una realidad que los menores lleguen a Dallas a albergues previamente acondicionados para ellos.
Además pidió a residentes que llamen a sus congresistas para presionar por una solución justa.
