Si compró ciertos tamales y no saben a lo que usted esperaba, es que no tiene la carne que dice la etiqueta, es otra.
La compañía ''El Padrino'' cuya sede se localiza en Irving, Texas, ordenó el retiro de dos mil libras de tamales del mercado porque fueron etiquetados erróneamente.
Realmente no están causando daños a la salud. El problema es que la carne que dice la etiqueta es errónea. Se indica que es carne de res y realmente son de puerco.
Según un comunicado del Departamento de Agricultura de Estados Unidos, refiere que los tamales fueron vendidos desde mayo con fecha de caducidad en diciembre y fueron distribuidos en Texas, Luisiana, Oklahoma y Kansas.
Si usted compró esta marca, y le gusta la carne de puerco, puede disfrutarlos, no pasa nada, no hay riesgo sanitario.
Pero si no le gustan los de puerco por alergia y alguna otra condición, entonces regréselos a la tienda donde los compró para la devolución de su dinero.