Con la temporada de impuestos también llegan los esfuerzos de los estafadores para robar su dinero.
Se trata de un fraude a través del cual criminales se hacen pasar por agentes del servicio de rentas internas o IRS y le llaman a los contribuyentes para exigirles que paguen supuestas deudas de impuestos.
Con frecuencia los criminales amenazan con llamar a la policía si el contribuyente cuelga el teléfono.
El inspector general del departamento dice que ellos están enterados de que los criminales usan el nombre de la agencia para asustar a la gente y robarle el dinero.
Se estima que más de cinco mil víctimas han caído pagándoles aproximadamente 26 millones de dólares a estafadores.
Cuando empezó el crimen los estafadores contaban con alguna información de sus víctimas, pero ahora hacen llamadas al azar incluso a teléfonos celulares.
Para prevenir que los consumidores caigan en el engaño, la agencia ha publicado cinco nuevos videos en inglés y español donde básicamente le dicen a la gente que el IRS nunca llamará para cobrarle ni amenazarlo con arrestarlo o deportarlo.