MÉXICO - En las playas los turistas pasean como si la pandemia no existiera, se hacinan y no usan cubrebocas.
Por ello, las autoridades de Acapulco, en el estado de Guerrero, decidieron romper la tradición y, además de cancelar el espectáculo de pirotecnia, cerrarán las playas a donde la gente acude a despedir al año viejo.
"Este año no será posible, se lo pedimos principalmente para cuidar la salud de su familia y la de usted”, afirmó Érika Lurhs, de Comunicación Social de Guerrero.
A partir de este martes y hasta el próximo 31 de diciembre, en punto de las siete de la noche, la orilla del mar deberá quedar vacía y nadie podrá acercarse…
La secretaría de Marina, la Guardia Nacional y los policía locales y estatales serán los encargados de vigilar que los turistas no se acerquen a las área donde se pretende evitar aglomeraciones.
Y es que a pesar que este puerto es el centro de la emergencia sanitaria en Guerrero, personas de todo el país no ha dejado de visitarlo; incluso se han registrado imágenes como en la que se aprecia que un hombre descansa bajo el sol usando un tanque de oxigeno y con otro de reserva sobre la arena.
Como Berenice González, los visitantes se dijeron decepcionados porque esta vez no podrán dar la bienvenida al 2021 junto al ir y venir de las olas.
"Normalmente es una tradición mexicana y al no haberla nos sentimos tristes, pero es una medida fortuita y necesaria para mantener la salud de todos los mexicanos", considera González.
Y más lo lamentan los proveedores turísticos, porque comúnmente en esas fechas y sobre todo el 31 de diciembre se reúnen en ese lugar más de 300,000 asistentes.
"Nos afecta pero sabemos que es inevitable y no se puede hacer para que esto no suba a semáforo rojo", admite Gabriel García, uno de los vendedores en la playa.
A pesar de los riesgos, se espera que a partir de este martes la ocupación hotelera en Acapulco, aumente y alcance su máximo para le celebración de año nuevo.